Los momentos previos al asalto del taxista Pablo Sánchez

Los 30 minutos anteriores a que el taxista Pablo Sánchez fuera baleado por la espalda en calle La Pampa y Guiñazú, esconde una trama tan oscura como dudosa que planteó este jueves Daniel Costich, por ahora, el único detenido vinculado al caso. Se habla de cocaína y de robo frustrado.

Costich quedó detenido, con 6 meses de prisión preventiva, por orden de la jueza Ana Malvido. Tal cual así lo pidió la fiscalía, bajo la figura de robo doblemente agravado por uso de arma de fuego y en carácter de participante necesario. En su relato, por tramos dudosos, reveló cuestiones que hasta ahora se mantenían en secreto, sobre los minutos previos al asalto a Sánchez.

Todo comenzó 3,50 horas en la estación de servicio de calle Bahía Blanca y ruta 22, cuando Costich ingresó a comprar un encendedor según quedó registrado en las cámaras de seguridad. Luego, se dirigió por Bahía Blanca a la estación de servicio de GNC, a 200 metros antes de las vías. Allí, según su versión, quiso comprarle cocaína a tres hombres que se encontraban en el lugar, y a quienes sindicó como los autores del sangriento asalto. Dijo que desconocía qué es lo que iban a hacer.

En su testimonio, Costich dice que, si bien no pudo concretar la compra de droga, se ofreció a llevarlos al centro porque el vehículo de ellos tenía un desperfecto mecánico. Los dejó en avenida Argentina y calle San Martín, donde tomaron el móvil 051 de Sánchez. Por tramos dudosos y poco creíbles, insistió el detenido en que no conocía a estos hombres.

Unos minutos más tarde, el Renault Megane que conducía Costich según el registro fílmico, aparece en la calle Guiñazú, metros antes de La Pampa, donde se produjo el asalto. No está clara la vinculación de Costich con los asaltantes y tampoco la filmación, pues se observa –según se vio en la audiencia de este jueves a la noche- porque se observa circular el auto con las luces apagadas y en dirección contraria los asaltantes, pero no se ve el momento en que lo abordan.

Otro dato revelador de la audiencia es que se habla de un robo frustrado, no porque el móvil no fuera ese sino porque a los asaltantes se les cayó la billetera del taxista Sánchez, en el asiento trasero, derecho. Es común que los choferes usen dos billeteras, una con cambio y otras con más dinero.

No obstante, no está claro aún el móvil para la fiscalía y no se descarta ninguna hipótesis. De hecho, para la justicia los asaltantes de Sánchez están prófugos.