En las primeras horas del domingo, un sismo de magnitud 5,5 sacudió el noreste de China. El primer recuento de víctimas y daños indicó señaló saldo fue de 20 heridos y decenas de inmuebles colapsados. El sismo se registró 26 kilómetros al sur de la ciudad de Dezhou, en la provincia de Shandong, a una profundidad de 10 kilómetros. Se derrumbaron más de 120 casas.
Por otra parte, China viene sufriendo las consecuencias del tifón Doksuri. Al menos 20 personas fallecieron y otras 30 se encuentran desaparecidas, como consecuencia del fenómeno. 130.000 personas fueron evacuadas también.
China enfrentó la temporada de lluvias más intensa en los últimos 140 años. La solidaridad de la comunidad internacional no tardó en llegar, incluso desde sectores distanciados del gobierno chino por otras cuestiones. Tal es el caso del Alto Representante para Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, quien ofreció la ayuda de Bruselas al gobierno chino.
En la misma línea, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha trasladado este viernes a su homólogo chino, Xi Jinping, sus "sinceras condolencias" por los estragos del tifón 'Doksuri' a su reciente paso por el país asiático. "Deseo la recuperación de las víctimas y la pronta restauración de la infraestructura destruida", señaló Zelenski a través de redes sociales.