Mel Gibson lidera el ranking de Netflix con una intrigante película que se ha convertido en la más popular de la plataforma, situándose en el primer puesto del ranking. En la trama, un presentador de radio recibe una llamada en directo, en la que un desconocido amenaza con poner en peligro a toda su familia.
Para rescatar a sus seres queridos, el locutor se ve obligado a participar en un juego de supervivencia donde la clave para la victoria es desentrañar la identidad del criminal.
En "Secuestro Directo", Mel Gibson interpreta a Elvis, un icónico locutor de radio que conduce un programa nocturno en el que personas con diversos problemas llaman en busca de consejos. El protagonista se presenta con un perfil antagónico, capaz de generar tanto aversión como afecto entre sus seguidores.
Con un encanto irresistible pero también un historial de infidelidades y bromas pesadas, Elvis es un antihéroe con un atractivo carismático y una naturaleza repulsiva al mismo tiempo.
Todo toma un giro inesperado cuando Gary (Paul Spera) se comunica con la emisora en una noche fatídica, culpando al locutor de sus desgracias y revelando un retorcido plan de venganza: el secuestro de su esposa e hija; y amenaza con asesinarlas si no sigue sus instrucciones al pie de la letra.
Frente a semejante amenaza, Elvis se embarca en una misión junto con su equipo, los únicos presentes en el edificio, en un intento desesperado por rescatar a su familia y sobrevivir a esta situación extrema.
"Secuestro en Directo" se posiciona como la obra más destacada de Gibson desde "Blood Father" (2016), ya que aprovecha la controvertida reputación del ícono de Hollywood en busca de una redención en pantalla. Gibson toma el control de la película con la mayoría del metraje centrado en su rostro, asumiendo un papel fundamental en la narrativa.
La trama gira en torno a la redención de su personaje, que se convierte en el corazón del juego entre la realidad y la ficción que impulsa la historia.
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