Luego de recibir un desesperado llamado al 911 por parte de los vecinos de La Plata, la Policía debió romper la ventanilla de un auto estacionado en calle 43 entre 19 y 20 para rescatar a un bebé de un año y medio que estaba encerrado en el vehículo, al rayo del sol y no paraba de llorar.
Efectivos de La Motorizada de la Departamental hallaron al nene asustado y deshidratado en una silla en el interior de un Chevrolet Ágile. Su progenitora, una docente de unos 39 años, lo había dejado solo, encerrado, para ir a un centro de estética de la zona.
Mientras que el chico era asistido por una ambulancia del SAME la madre finalmente se presentó en lugar y, ofuscada, explicó que “solo había dejado a su hijo 15 minutos” para hacer unos trámites. Sin embargo, los testimonios en el lugar contradijeron su versión.
La principal hipótesis de los investigadores sostiene que la mujer habría estado ausente por lo menos dos horas y que en ese tiempo se encontraba en un centro de estética. Además, señalaron que intentó agredir a los policías que rescataron a su hijo.
Por otra parte, se supo que el menor quedó a resguardo de su padre y se encuentra en buen estado de salud. La causa fue caratulada como “Abandono de persona y resistencia a la autoridad” y quedó a cargo de la UFI 8 de La Plata.