Las patrullas nocturnas de la Policía de Neuquén se toparon con dos delincuentes en distintos puntos de la Confluencia, durante la madrugada de este viernes.
En primer lugar, uniformados de la Comisaría 52º de Centenario detuvieron a un sujeto que llevaba un bulto de gran tamaño a pie, proveniente de la calle Honduras. Pasadas las tres de la mañana, uno de los móviles se encontraba recorriendo la zona comercial de esa localidad cuando divisaron al hombre que, al advertir la presencia del patrullero, emprendió una huida que duró unos pocos metros antes de ser atrapado.
Luego de demorar e identificar a este hombre de 26 años, la Policía de Neuquén descubrió que lo que llevaba el malhechor era un reflector que no pudo corroborar que fuese suyo. Minutos después de recorrer brevemente la zona, los uniformados constataron que dicho objeto fue robado del exterior de un local comercial de la calle Honduras, por lo que se procedió a detener al hombre y secuestrar el elemento sustraído.
A la misma hora, pero en el Barrio Belgrano de la capital neuquina, un hombre de 31 años de edad se encontraba desarmando una caja de empalme de fibra óptica en plena vía pública. Una vecina advirtió el delito y se comunicó con el Comando de Operaciones de la Policía de Neuquén, quien envió a un móvil de la Comisaría Segunda a las calles Copahue y José Rosas.
Al llegar al lugar, la denunciante describió a los dos sujetos que manipularon cables en un poste de alumbrado de esa esquina y, luego de un operativo, dieron con uno de los maleantes en la esquina de Linares y Colihue. El delincuente de 31 años llevaba consigo una caja de empalme de fibra óptica, de la que tampoco pudo acreditar que fuera suya y fue detenido en la Sede de Avenida Olascoaga y Montevideo.