Una pareja que circulaba sobre la ruta 7 en un Volkswagen Gol color blanco, cerca del acceso a la localidad de General Lavalle, al sur de la provincia de Córdoba, vivió un momento de tensión cuando un camión los cruzó a alta velocidad, lo que provocó que lo siguieran hasta que el caminero maniobró el vehículo y chocó a sus perseguidores. Después, como ya se sabe, éstas historias no terminan nunca bien: el conductor del auto se bajó y se colgó en el acoplado del camión.
Todo comenzó cuando el vehículo de menor porte, que estaba detenido en un paso a nivel aguardando el paso de una formación ferroviaria, tuvo una discusión de tránsito con el camionero, que venía detrás, y comenzó a tocarles bocina insistentemente para que avancen. El hecho ocurrió la noche del viernes 2 de febrero pasado.
“Estábamos esperando el paso de dos trenes y estaban las barreras bajas, se demoró bastante, y el camión nos hacía señales de luces y tocaba bocina, es más, se bajó y empezó a decir cosas”, dijo Antonio, el conductor del rodado menor en declaraciones a la televisión.
Pero, el camionero comenzó a seguirlos sin el acoplado y la pareja del conductor del vehículo, al ver la imprudencia del camionero, empezó a filmarlo. El vehículo no tenía patentes visibles y hacía maniobras temerarias, impidiéndole el paso al coche. Hasta que se alejó y la situación, kilómetros después, se tornó peligrosa.
El camión frenó su marcha, se cruzó en el camino y el camionero comenzó a acomodar su rodado para buscar dar un giro en “U”. “Te va a girar, el tipo te va a girar”, dice ella, mientras su pareja, Antonio, dice nervioso “sí, lo sé” y lo repite dos veces más.
Cara a cara con el camión y en plena desesperación de la mujer, ella grita y se ve cómo el camión embiste un costado del coche. La mujer jamás dejó de filmar tan peligrosa escena y se tiró a la banquina.
Antonio, su pareja bajó, corrió al vehículo y se colgó de la cola del camión trepando al paragolpes para intentar dar con la patente del vehículo y denunciarlo, mientras su mujer gritaba “¡Antonio! ¡Antonio, vení!” y se lo ve al hombre de 33 años perderse montado en la cola del camión.
“Estoy cinco kilómetros colgado de la cola hasta que el camión frena y cruza las vías del tren, en ese momento me tiro e identifico la patente del acoplado que dejó abandonado para ir por nosotros“, explicó el conductor del Gol.
Y hace hincapié en la conducta criminal del camionero: “Me caigo del camión, me arrastra y cuando él ve que estoy en el piso, frena y da marcha atrás para chocarme nuevamente, quería pasarme por encima, me escondo debajo del acoplado”, relata.