Hubo jornada de miércoles en la Champions League, y algunos argentinos tuvieron su momento de protagonismo. Lo más saliente se vio a primer turno, con un partido vibrante entre Galatasaray y Manchester United en Turquía, que tuvo una muy buena actuación de Alejandro Garnacho, gol incluido, pero no fue con final feliz para su equipo.
El juvenil de la Selección Argentina abrió el marcador a los 11 minutos de partido y se convirtió en el tercer futbolista albiceleste más joven en anotar en Champions (19 años y 151 días), sólo por detrás de Lionel Messi y, horas más tarde, de Nico Paz. El duelo parecía resuelto para el United ya que a los 18 minutos Bruno Fernandes puso el 2-0, pero el descuento de Hakim Ziyech le puso condimento a un partido de vital importancia por el segundo lugar del grupo.
En el complemento el equipo inglés se puso 3-1 y parecía que se llevaba un triunfo vital, sin embargo un error insólito de su arquero André Onana le concedió el descuento a Ziyech y más tarde Kerem Akturkoglu le dio la igualdad final a Galatasaray, que tuvo desde el inicio a Mauro Icardi (le anularon un tanto por offside) y suma cinco unidades, superando por una al United de cara al último duelo. Los Diablos Rojos deberán ganarle obligadamente al Bayern Múnich si quieren pasar de fase.
El Sevilla de los argentinos, con un pie afuera de todo
El irregular andar del equipo andaluz se trasladó también a las competencias europeas, y podrían quedar afuera de todo. Sevilla se imponía como local ante PSV y se encendía la ilusión en el Sánchez Pizjuán, sin embargo todo se desmoronó. Sergio Ramos y Youssef En-Nesyri, asistido por el neuquino Marcos Acuña, pusieron el 2-0 parcial, pero faltando 25 minutos vino la debacle.
El argentino Lucas Ocampos se fue expulsado, tres minutos después el elenco neerlandés descontó y el empuje sobre el final le terminó dando rédito: el empate de Nemanja Gudelj en contra y el tanto de Ricardo Pepi en el descuento completaron la desgracia sevillana, que quedó último con dos puntos, eliminado de Champions y debiendo vencer sí o sí a Lens para clasificar a Europa League.
En otro duelo con argentinos involucrados, Benfica tuvo a los referentes de la Selección Argentina en cancha, con Nicolás Otamendi (hizo un penal) que capitaneó a las Águilas, y Ángel Di María como titulares. El conjunto portugués goleaba 3-0 como local pero el conjunto italiano terminó igualando 3-3 en el complemento. En el cuadro Nerazzurro, Lautaro Martínez fue al banco e ingresó diez minutos.
Por su parte, en la visita de Nápoli a Real Madrid también hubo goles argentinos. Giovanni Simeone que abrió la cuenta a los 9 minutos de partido, pero el Merengue iba a reaccionar. Un tanto de Nico Paz, que entró desde el banco y, como adelantamos, se transformó en el segundo argentino más joven (19 años y 81 días) en anotar en Champions. Este tanto le dio la ventaja a los españoles, que finalmente se impusieron 4-2 en el Santiago Bernabéu.
Con el triunfo del Real Madrid ante los italianos, el conjunto Merengue aseguró el primer puesto de su grupo. Por su parte, Nápoli complicó su clasificación a la próxima fase, ya que suma 7 puntos y deberá asegurarse la clasificación ante Sporting Braga, aunque le basta un empate para pasar.