Todavía sigue generando bronca e impotencia la falta de solidaridad de los atletas europeos que participaron en Turquía de la final de la carrera de 60 metros con vallas en el Campeonato Europeo Indoor de Atletismo, donde el español Quique Llopis protagonizó un golpe impresionante.
El atleta había comenzado mal en la salida y, en la etapa final, trastabilló con uno de los obstáculos y golpeó la cabeza duramente contra el suelo, mientras la competencia continuaba con el sprint final y ante la mirada atónita de los espectadores.
Ya terminada la carrera, el corredor seguía tirado, con el rostro visiblemente golpeado. El español fue examinado por los médicos y retirado con cuello ortopédico en camilla, sin siquiera recibir el apoyo de sus eventuales competidores
Otro de los aspectos que se resaltó en redes sociales, es que ninguno de sus rivales se acercó para chequear el estado de Llopis. Incluso, el ganador de la prueba, el suizo Jason Joseph, pasó por su lado festejando y ni se inmutó de la situación.
En cuanto al español, fue hospitalizado y se comprobó que no sufrió ninguna lesión ni fractura. Permanecerá la noche en observación y hoy regresará a su país. "Estoy bien, agradezco todas las muestras de cariño y apoyo", sostuvo el deportista en un video.