La reina Máxima Zorreguieta sigue disfrutando de las maravillas de la Patagonia argentina durante su visita navideña al país que la vio nacer. Desde el 21 de diciembre, Máxima y su familia han explorado diferentes destinos del sur argentino, siendo su más reciente parada la encantadora Villa La Angostura, donde fue vista disfrutando de las aguas cristalinas del lago Nahuel Huapi.
Imágenes compartidas por la cuenta de Instagram Chismesdeker capturaron a la soberana en la orilla del lago, luciendo un traje de baño de dos piezas de color morado que resaltaba su elegancia natural. El conjunto, compuesto por un corpiño tipo bandeau y una bombacha alta, a la cintura, reflejó el estilo sofisticado pero relajado que caracteriza a Máxima.
En una de las publicaciones, Chismesdeker comentó: “Y la familia real disfrutó de Villa La Angostura”, destacando la presencia de Máxima Zorreguieta junto a miembros de su comitiva. Otra imagen, titulada “Máxima valiente”, mostró a la reina caminando por las frías aguas del Nahuel Huapi, con el agua hasta las rodillas, demostrando que la soberana no teme apartarse del protocolo para conectarse con la naturaleza.
La familia real también fue vista en El Calafate, uno de los puntos más icónicos de la región. Un video, también difundido por Chismesdeker, muestra a Máxima, el rey Guillermo y sus hijas caminando hacia una excursión. En el clip, la princesa heredera, Amalia, aparece en primer plano, dejando ver el entusiasmo familiar por descubrir los paisajes argentinos.
Durante su estadía en El Calafate, la familia real visitó el majestuoso Glaciar Perito Moreno, una experiencia inolvidable que tuvo lugar en el Parque Nacional Los Glaciares. Este destino es uno de los más emblemáticos de la Patagonia y una parada obligada para quienes visitan la región.
Después de disfrutar de las maravillas de El Calafate, los monarcas se trasladaron a Bariloche, donde celebraron la Navidad en un ambiente íntimo y familiar. Esta visita no solo refuerza los lazos de Máxima con su tierra natal, sino que también pone de relieve la belleza de la Patagonia como destino de clase mundial.
Con cada parada en su recorrido, Máxima Zorreguieta y su familia no solo han explorado paisajes inolvidables, sino que también han dejado una estampa de cercanía y calidez, mostrando que, a pesar de la realeza, las simples alegrías de la naturaleza también son dignas de celebrarse.