La Guardia Costera griega confirmó el deceso de 17 migrantes tras el hundimiento de un buque pesquero que transportaba "un número indefinido" de personas. Del mismo buque, 104 migrantes fueron rescatados.
El buque había salido desde Libia, en el norte de África, y se dirigía hacia Italia, como en general sucede con los barcos de migrantes partidos desde la parte norte y este de África. Según fuentes del lugar, el buque trasladaba a 400 personas, por lo que "es posible que todavía haya varios desaparecidos". Grecia está efectuando la búsqueda y rescate de desaparecidos. Para ello desplegó una fragata de la Armada y un helicóptero. También está participando un drone de Frontex, la agencia de fronteras de la Unión Europea
En paralelo, la guardia griega también rescató a otras 80 personas que estaba al sur de la isla de Creta. Las mismas se trasladaban en un velero, que se encontraba perdido en pleno mar. Lo mismo había sucedido el pasado domingo al sur de la península del Peloponeso, cuando las mismas fuerzas rescataron a 90 migrantes que se trasladaban en un yate.
El drama de los migrantes provenientes desde el norte de África, así como también los que se trasladan desde Medio Oriente, es un problema sin solución aparente. Redes de traficantes de personas los trasladan en embarcaciones de dudosa confiabilidad. Todos buscan ingresar a Europa a través del sur de Italia.