A pesar de que las operaciones israelíes han seguido especialmente centradas en la ciudad de Jan Yunis, en el sur de la Franja, un ataque más al norte dejó al menos 14 muertos. Según fuentes locales, el Ejército israelí atacó el campamento de refugiados de Nuseirat (centro), donde 11 personas perdieron la vida. Además, otras tres personas han muerto en otro bombardeo contra una casa en el pueblo de Zawaida (centro).
Los alrededores del Complejo Médico de Nasser, en Jan Yunis, han seguido sometidos a intensos disparos de artillería y de ataques con drones. Hace unos días, la Media Luna Roja Palestina denunció también ataques israelíes contra su sede, el Hospital Al Amal, en la misma ciudad.
Estos ataques se dieron horas antes de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) emita su primer dictamen sobre el juicio llevado a cabo sobre Israel por la supuesta comisión de un genocidio en Gaza. La denuncia la había hecho Sudáfrica, y la comunidad internacional espera con ansias la resolución del tribunal. Hamas ya dijo que acatará una eventual tregua dispuesta por la CIJ.
La presión de la comunidad internacional sobre Israel es cada vez mayor, aunque el gobierno de Netanyahu desestimó detener su ofensiva. Tanto Estados Unidos como la Unión Europea, además de muchos otros países, están presionando al líder israelí para detener el ataque. Además, insisten en que la creación de un estado palestino es la solución al conflicto.