Tras la despedida del cepo cambiario el Gobierno anunció que ingresará en otra modalidad. Se trata de un régimen de bandas móviles que le dará un giro trascendental a la política que se aplicaba hasta ahora.
Pero… ¿Cómo funcionará ese “sistema de bandas”? Lo básico es que el tipo de cambio fluctuará entre un piso de $1.000 y un techo de $1.400, con un ajuste mensual del 1% para cada extremo.
Reservas, la clave
Para mantener ese equilibrio, cuando el dólar se ubique cerca del piso el Banco Central comprará divisas. Allí acumulará reservas. Pero cuándo eso varíe y la cotización suba, para contenerla en el techo impuesto saldrá a venderlas. Será una forma de equilibrar la voluntad de los mercados, moderándola a pura intervención estatal.
La clave es que el BCRA cuente con reservas para intervenir cuando se necesite lograr ese equilibrio. En otros países (como Israel, Chile o Colombia) la misma dinámica funciona con éxito.