Un hombre se escapó con su amante y su mujer terminó llamando a la policía asustada de que lo hayan secuestrado. Se desplegó un amplio operativo; ahora las autoridades exigen que el "desaparecido" pague su búsqueda. La imagen del empresario boliviano Kenny Álvarez Echalar, que reside en Tucumán empezó a circular por las redes sociales los primeros días de marzo, su esposa, estaba desesperada, y luego de acercarse a la comisaría la principal hipótesis apuntaba a un posible secuestro.
Todo hacia creer que dicha hipótesis, ya que Echalar salió de su casa a bordo de su camioneta con una gran suma de dinero para realizar trámites bancarios relacionados con el negocio familiar. Días más tarde su vehículo apareció estacionado en los alrededores de un hotel en la zona de San Lorenzo y Congreso, y allí, la investigación dio un giro y empezó a contemplar un posible problema doméstico.
Las cámaras de seguridad fueron claves, así se supo la verdad: El empresario no estaba secuestrado ni había sido víctima de ningún otro delito. Lo encontraron sano y salvo alojado en el hotel Colonial de Tafí del Valle, en compañía de una mujer que no era su esposa.