Este mes, Netflix trae a su plataforma "El Negocio del Dolor", dirigida por David Yates, conocido por su trabajo en la franquicia de Harry Potter. La película, protagonizada por Chris Evans y Emily Blunt, aborda la impactante "crisis de los opioides" en los Estados Unidos, cuya raíz se encuentra en el analgésico OxyContin, lanzado en 1996 por Purdue Pharma, propiedad de la familia Sackler. Este medicamento fue promocionado como un analgésico aparentemente inofensivo, pero la oxicodina y el fentanilo pasaron de ser recetados por médicos a ser buscados por pacientes que eventualmente se convirtieron en adictos.
La película se estrena hoy 27 de octubre en Netflix, sumándose a la conversación en torno a la crisis de los opioides en los Estados Unidos.
La película narra la vida de Liza Drake (interpretada por Emily Blunt), una madre soltera en medio de una crisis económica. Su encuentro fortuito con el representante de ventas farmacéuticas Pete Brenner (interpretado por Chris Evans) la lleva a ingresar al laboratorio Insys en 2012, en un momento en que la empresa se tambalea al borde de la bancarrota. Allí, Liza logra que el Lonafin, un opioide a base de fentanilo, sea recetado por ciertos médicos como analgésico para pacientes con cáncer. Mientras lidia con un jefe cada vez más desquiciado (Andy García), la recaída de su hija (Chloe Coleman) y su creciente conciencia de la catástrofe que la empresa está desencadenando, Liza se ve obligada a evaluar sus opciones.
A pesar de su elenco estelar y la relevancia del tema, "El Negocio del Dolor" combina elementos de sátira, denuncia y moralina, lo que lo que enriquece su enfoque narrativo, ofreciendo al espectador una experiencia cinematográfica única y reflexiva.