Después de haber intentado junto a dos cómplices robar a mano armada a un hombre y tras una vertiginosa persecución, la policía de General Roca detuvo a un conocido delincuente que, entre otros tantos ilícitos, fue condenado por el resonante asesinato del hampón al que apodaban “Cacha Pelada” en Allen en 2013. Para poder arrestarlo, un efectivo policial le disparó en una pierna y tuvo que ser internado.
Todo ocurrió alrededor de las 20.30 cuando los tres ocupantes de un Chevrolet Corsa color champagne quisieron robar a un hombre a punta de pistola en calle Neuquén al 1700. Para ello se habrían hecho pasar por interesados en comprar un vehículo y atacaron a culatazos al morador de una vivienda con la intención de ingresar a la casa, pero no lo lograron.
Cuando escapaban, fueron vistos por un móvil policial que patrullaba la zona. Dos motoristas se sumaron al procedimiento y allí comenzó una veloz persecución que se extendió por unas quince cuadras hasta que en la esquina de Gadano y Fleming.
Según el informe policial, los tres ocupantes del auto descendieron y uno de ellos se avalanzó contra los uniformados con un machete en la mano. El policía que lo enfrentó le disparó con su escopeta con postas de goma en la pierna derecha para poder detenerlo. Un segundo hombre fue detenido dentro del auto y el tercero quiso escapar corriendo por Fleming donde se deshizo de una pistola calibre 9 milímetros. Con los tres hombres detenidos, la policía secuestró otra pistola calibre 11.25.
Uno de los apresados fue identificado como Cristian Espinoza, protagonista en varias crónicas policiales de la región y condenado, en 2013, por el asesinato del narco Luis Miguel “Cacha Pelada” Ayala, quien vivía en Allen. Un año más tarde, fue sobreseído por el Superior Tribunal de Justicia. Espinoza, con el balazo en la rodilla, fue internado en el hospital López Lima pero su estado no reviste gravedad.