Juana Ruiz tenía 77 años. Fue asesinada a puñaladas. La mataron para robarle. Y, como muestra de crueldad extrema, antes de irse, los ladrones y asesinos le dejaron incrustado en el cráneo el cuchillo que usaron para matarla. Esto ocurrió en la vivienda de la víctima, ubicada en la localidad bonaerense de Cuartel V, en el partido de Moreno.
Según las primeras informaciones, se trató de un intento de robo por parte de un grupo de delincuentes quienes, tras matarla, huyeron, no sin antes dejar esa macabra escena.
Ruíz fue encontrada por sus vecinos en el interior de la finca en la que residía, situada en el cruce de la avenida Darwin Passaponti (la ruta provincial 25) y Agrelo. El domicilio está ubicado a 200 metros del denominado arroyo Las Catonas, en el oeste del Gran Buenos Aires. De acuerdo con los peritajes sobre el cuerpo, se trató un ataque a cuchilladas y los atacantes, antes de escapar, le dejaron el arma blanca incrustada en el cráneo.
Se lleva adelante un amplio operativo policial para dar con los responsables del crimen. Se calificó el hecho como “Homicidio” e interviene el fiscal Gabriel Sebastián López, a cargo de la Unidad Funcional N° 8 del departamento judicial de Moreno-General Rodríguez.