Una impresionante madrugada de violencia y caos se vivió este viernes en el conurbano bonaerense. Fue en La Matanza, donde el gremio de los choferes, la UTA, lanzó un paro tras el asesinato de un afiliado, y choferes de colectivos protagonizaron graves incidentes, que incluyeron la quema de varios automóviles.
La situación se generó en el homicidio de Pablo Flores, conductor de la línea 218 de la empresa Almafuerte, quien recibió un disparo en la cabeza cuando estaba manejando su unidad por la Ruta Nacional N° 3, a la altura del barrio San Javier, dentro de la localidad de Virrey del Pino.
Los asesinos se subieron al transporte y atacaron al chofer, aunque todavía se intentan dilucidar los motivos del crimen. Por esta razón, la UTA declaró un cese de actividades que empezó a la medianoche de este viernes y afecta por 24 horas a “más de 40 líneas” que circulan por la zona Oeste de la provincia de Buenos Aires.
El gremio seguía esta mañana bloqueando la General Paz. Mientras, los restos calcinados de vehículos y edificios lindantes dañados, eran testigos del alto nivel de violencia que se vivió durante un par de horas intensas de enfrentamiento con la policía.