El choque fue violento: el motociclista conducía por Avenida del Trabajador. En dirección sur y por calle Racedo lo hacía una camioneta, en el corazón del oeste neuquino. El impacto fue de tal magnitud que el rodado menor quedó incrustado, al punto que intervino personal de Bomberos para cortar los hierros de la camioneta y rescatar al motociclista. Mientras se lo socorría, una multitud se amontonó en el lugar y tiró por tierra cualquier protocolo posible. Ocurrió alrededor de las 22,30 horas.
El motociclista, de acuerdo a la escueta información que dio la Policía en el lugar, resultó con gravísimas heridas y múltiples fracturas. Y de acuerdo a los primeros testimonios, uno de los conductores habría cruzado con el semáforo en rojo.
La Policía, que acudió con varios móviles, no dejó pasar el detalle: “en cuestión de segundos, una multitud se concentró en el lugar, pese al horario de escasa circulación y no todos, con barbijos”.
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