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Jefe policial usa una camioneta secuestrada a un puntero

La Toyota Hilux tenía prohibición de circulación por tener los números de chasis y motor adulterados.
Domingo, 19 de junio de 2022 a las 00:00

El viaje de un conocido puntero de Juntos Somos Río Negro se cortó abruptamente cuando en el puesto caminero de Choele Choel los policías notaron algunas irregularidades en la llamativa Toyota Hilux negra que viajaba desde Viedma a Bariloche. Por orden de la Justicia la camioneta quedó secuestrada y sus ocupantes debieron seguir viaje en colectivo. A casi un año de aquel operativo, el vehículo volvió a circular, ya sin patentes y en manos de un jefe policial.

Al pasar por el destacamento de Seguridad Vial de la Policía de Río Negro en Choele Choel, se puede ver la gran cantidad de vehículos abandonados en la banquina, en inmediaciones del edificio. Muchos están chocados y permanecen allí en carácter de secuestro. Otros, se los puede ver en aparente buenas condiciones y esos también están vinculados a alguna causa judicial casi imposible de resolver por tener la numeración de chasis y motor adulterada.

Tras aquel operativo de fines de agosto del año pasado, la suerte de la Toyota Hilux negra era acompañar a esos vehículos que copan la banquina de la ruta 22 a la altura del kilómetro 998. Es que cuando llegó su conductor a ese sector, explicó que viajaba desde Viedma hacia Bariloche y pese a tener muy buenos contactos en el gobierno provincial, no logró zafar del control. Al exhibir la documentación los uniformados notaron que la cédula no tenía los sellos de seguridad y las chapas tampoco eran las originales.

Quien conducía la camioneta es un conocido puntero de JSRN de Bariloche, Alejandro “Taca” Nahuelquín, ex funcionario de Alberto Weretilneck y de la gestión de Arabela Carreras como director de Políticas Sociales Tradicionalistas, quien fue echado tras el escándalo que protagonizó su pareja -también funcionaria de la Secretaría de Energía- Verónica Olea Picapietra, a la que Gendarmería le encontró una caja con tres millones de pesos dentro de la camioneta oficial con la que viajaba a Bariloche.

Los policías de la planta verificadora de Choele Choel no sólo constataron esas irregularidades, sino que también detectaron que la numeración de chasis y de motor estaban adulteradas, por lo que no hubo forma de que la camioneta pueda seguir circulando. Por orden de la Justicia fue secuestrada por que los códigos identificatorios presentaban falencias en el alineado y formas de los números.

Ante la escasez de vehículos que tiene la Policía, y teniendo en cuenta el muy buen estado en el que se encontraba la camioneta, desde la Unidad se habría solicitado a la Justicia que les fuera asignada. Y parece que esta es la razón por la cual en vez de permanecer años y años tirada y que quede inutilizada, se habría autorizado su uso con algunas condiciones. Entonces la llamativa Toyota Hilux Limited negra con vidrios polarizados y varios detalles cromados volvió a circular por las calles, en este caso de las distintas ciudades de Valle Medio.

Hay un detalle llamó la atención. Es que el permiso de uso habría sido otorgado por la Justicia hacia la unidad policial, pero quien maneja la camioneta como si fuera propia es una de las máximas autoridades de Tránsito policial. De hecho trascendieron fotos del vehículo sin patentes identificatorias estacionado en la puerta de la vivienda particular del sub comisario Mauro Quiroz, Jefe de Zona, a cargo del destacamento vial.

El hecho provocó indignación en los subordinados quienes rápidamente hicieron trascender esta irregularidad. Si bien en un primer momento hubo un intento de que las máximas autoridades policiales tomen algún tipo de determinación, las quejas quedaron en nada y sólo se escucha rumores de la cercana afinidad de Quiroz con el Jefe de Policía, Osvaldo Tellería. De hecho fue él quien lo designó para que vuelva al destacamento caminero donde había cumplido funciones hace varios años y luego había sido trasladado a varias comisarías del Alto Valle.

Desde la Justicia no hubo información oficial, sólo las fuentes consultadas se limitaron a confiar que existe una acordada del Superior Tribunal de Justicia que autoriza el uso, con una resolución previa, de algunos vehículos secuestrados por parte de algunas áreas de la Policías, pero que estos no se pueden utilizar para operativos de seguridad ni para el desplazamiento de integrantes de brigadas y deben respetar todas los requisitos para poder circular.

 

 

 

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