Antes que salga el sol, las camionetas de Gendarmería coparon el barrio Colonizadora del Sud en Allen. Los procedimientos fueron ordenados por el juez federal Hugo Greca tienen como destino varios domicilios marcados como kioscos narcos. También dispuso allanamientos simultáneos en otros puntos del Alto Valle. Hasta el momento se informó del secuestro de un kilo de cocaína, que en el mercado puede alcanzar un valor de 10 millones de pesos.
Aunque no existe información oficial, trascendió que el magistrado roquense ordenó los procedimientos y para evitar filtraciones decidió intervenir con Gendarmería, que desde hace varios días planifica la manera de desarrollarlo por la gran cantidad de personal que necesita.
Sólo en Allen, se contabilizaron dos furgones y unas 10 camionetas que llegaron durante la madrugada y se ubicaron en los distintos accesos al barrio Colonizadora, en cercanías del cementerio municipal. También hay despliegue en Barrio Norte, Tiro Federal y 17 de Agosto.
También hay allanamientos en simultáneo en Centenario y Plottier, con una cantidad similar de efectivos de la fuerza federal, con una disposición similar en la planificación.
De acuerdo con lo que trascendió, no se trataría de un golpe a una mega organización que opera en la región. Sino, que por el contrario, son varios domicilios que se los tiene identificados como kioscos, desde donde operan distintos narcos para vender droga en los barrios.
Según trascendidos, porque no hay confirmación desde la Justicia Federal, se desbarataron más de una docena de kioscos que funcionaban de manera independiente, pero con una organización similar que fraccionaba la cocaína y la vendía en bagullos de 1 gramos con un costo aproximado de 10 mil pesos de acuerdo con la pureza de la droga.
En uno de los allanamientos se encontró un kilo de cocaína que puede alcanzar un valor de 10 millones de pesos, aunque siempre puede se run poco más, si se tiene en cuenta que utilizan distintas sustancias en polvo para estirarla y hacerla rendir más.