La investigación de la muerte de la pareja de Piedra del Águila, cuyos cadáveres fueron encontrados por los bomberos mientras extinguían el incendio en la vivienda, confirmaría la teoría de que se trató de un femicidio seguido de suicidio.
El fiscal Manuel González recibió el informe preliminar de la autopsia al cadáver del empleado municipal de Piedra del Águila, Víctor Iván Aravena, que concluyó que su muerte “se debió a un traumatismo craneoencefálico grave por proyectil de arma de fuego” y que presentó características compatibles con una muerte violenta “por lesión autoprovocada”.
El fiscal informó, además, que junto al cuerpo de Aravena fue encontrado un revólver calibre 32 con una vaina servida en el tambor.
El informe de la necropsia al cuerpo de Carolina Epullán, quien era empleada de piscicultura, señaló que presentaba 19 lesiones de arma blanca, muchas de ellas “de defensa”. Es decir, que resistió el ataque. Y la herida letal fue una puñalada en el pecho.
La teoría del caso del Ministerio Público Fiscal es que el autor del femicidio fue Aravena, quien después de cometerlo, se habría quitado la vida. Para comprobarla, el fiscal González señaló que ya se tomaron testimonios a personas cercanas y que se ordenaron pericias, entre ellas, la apertura de cinco celulares hallados en el lugar del hecho.
El fiscal González destacó que ninguno de los vecinos de la pareja escuchó una discusión o pedidos de ayuda previo a la tragedia. También indicó que no hay constancias de denuncias previas por violencia de género.