Comienzan a aparecer voces en relación a los abusos en la sala de 3 años del un colegio privado de Roca. Desde Educación confirmaron que intervienen a partir de una presentación de los directivos de la Escuela Del Valle, pero que no existe denuncia.
El primer caso de abuso en el jardín de infantes del colegio privado con sede a la vera de la ruta 22, se conoció porque fue la madre de la víctima quien hizo publico la situación que padecía con su hijo, quien luego de llorar un día entero, le contó que le dolía la cola porque “la seño” le había metido el dedo.
Esta situación también fue expuesta entre los padres, y a partir de allí surgió un segundo hecho que tiene como presunto culpable al profesor de educación física, en perjuicio de un segundo niño de 3 años.
Desde la escuela y luego de varios pedidos concretos de los padres de los niños, decidieron separar a los docentes. También por recomendación de la Dirección de Escuelas Privadas dependiente del Ministerio de Educación de la provincia.
Precisamente desde ese organismo el director, Gabriel Blanco confirmó que tomaron conocimiento por la dirección del colegio privado y que están trabajando en una “situación o algo que podría considerarse como abuso sexual en Nivel Inicial”.
También aclaró que ante este tipo de casos se pone en práctica un protocolo que indica tomar contacto con la familia y la institución “para escucharlos y ver qué sucede”. Indica también que los padres de la víctima o el colegio debe hacer la denuncia judicial, pero que “en este caso la hicimos nosotros”. Sin embargo desde la Justicia rionegrina negaron que exista una denuncia al respecto.
De todas maneras, el viernes pasado existió un encuentro entre algunos padres con un representante de una fiscalía especializada en abusos sexuales, con miembros de la Oficina de Atención a la Víctima y la Defensoría de Menores. Expusieron las dos situaciones que se conocen que tienen como presuntos autores a dos docentes y se les explicó cómo era el trámite para realizar la denuncia.
La madre del primer menor, el que se quejó por el dolor en la cola y responsabilizó a “la seño” de haberle metido el dedo, decidió no hacer la denuncia para evitar revictimizar a su hijo.