Villa la Angostura sigue conmocionada por el violento hecho ocurrido durante el fin de semana, y mientras los vecinos murmuran que la inseguridad se está apoderando de la localidad, los rumores crecen en torno al posible móvil de lo ocurrido en la coqueta casa que terminó con una muerte y dos jovencitos heridos.
Como ya lo adelantara Mejor Informado, la hipótesis del robo comienza a tambalear, y se analiza si el joven que terminó sin vida, habría ingresado a la vivienda con algún otro interés.
Lo primero que se pone en duda, es que la víctima hubiera sido sereno de una obra, y que hubiera estado detenido por ebriedad la noche anterior. Algunos aseguran que el joven había llegado a la Villa desde Junín de los Andes, en las horas previas al incidente.
Se habla también de problemas de salud mental, que le habrían generado un brote psicótico con un alto grado de violencia, al encontrarse con la negativa de los jovencitos para que ingrese y permanezca en la vivienda de su tío ( o primo ), que se encontraba de viaje en Chile.
Otras incógnitas comienzan a surgir con el correr de las horas: ¿Dónde está la madre de los adolescentes, que no aparece en ningún relato?. Agresor y víctima se conocían, considerando que uno era familiar y otro cuidador temporal de la vivienda?, la víctima ¿habrá pensado que eran usurpadores de la casa de su pariente ?¿Había algún "ajuste" pendiente entre los dos mayores?.
El tema es que hasta aquí, el caso "se vende" como un intento de robo que terminó muy mal, con dos adolescentes heridos ( por suerte fuera de peligro), y con un "héroe" que en defensa de sus hijastros mató a un desaforado atacante, con la misma arma blanca conque estaba hiriendo a los chicos.
Hernán - única identificación que se conoce hasta el momento- está declarando esta mañana en la Fiscalía de esa ciudad, luego de haber sido rápidamente liberado. Enfrenta una causa por homicidio simple, aunque "la legítima defensa" lo eximiría de cualquier condena.
No se conoce la identidad de la víctima, sólo que se trata de un joven de unos 25 años. El victimario tiene 29.
Como no podía ser de otra manera, en la pequeña Villa también comienza a hablarse de drogas.
La fiscalía tiene por delante una gran tarea de investigación. Probablemente tengan que declarar los adolescentes, y allí pueda comenzar a desatarse algún nudo. Por ahora es una historia trágica, que conmueve a una localidad, y que deja muchas dudas en el camino.