Luis Benjamín Benítez, el hombre acusado de matar de siete puñaladas al delivery Lucas Aguilar en el partido bonaerense de Moreno, presenta un extenso prontuario delictivo desde hace 19 años.
El asesinato de Aguilar se produjo en la intersección de las calles Asconapé y Alem, alrededor de las 19.45 del jueves, luego de que el joven siguiera con un palo a un hombre que había acuchillado a un vendedor de alfajores identificado como Leonardo Ernesto Merollo. En el forcejeo, tal como se observa en imágenes grabadas por una cámara de seguridad, Lucas cayó en la vereda y recibió varios puntazos. Pese a incorporarse, a los pocos segundos se desplomó en el asfalto ante la presencia de vecinos que intentaron intervenir, pero no pudieron evitar el fatal desenlace.
Por el homicidio fue detenido Luis Benjamín Benítez, un hombre de 38 años que fue interceptado en las inmediaciones de la Plaza San Martín y reducido por los oficiales. En su poder se le secuestró un cuchillo tipo carnicero. Las primeras investigaciones indican que mantuvo una confrontación con Merollo, a quien apuñaló en el tórax y el abdomen.
En primer lugar, el presunto homicida de Aguilar fue detenido por el delito de robo calificado en poblado y en banda el 3 de marzo de 2006.
Por su parte, el 21 de mayo de 2009, fue detenido por tentativa de robo, el 17 de julio de ese año, resultó aprehendido por robo simple, mientras que el 17 de septiembre, terminó tras las rejas por tentativa de robo simple. Finalmente, el 22 de octubre, fue capturado por robo calificado.
Sin embargo, luego de permanecer alojado en la unidad penitenciaria número 43 de Florencio Varela, el imputado recuperó la libertad, aunque seis días más tarde regresó a la cárcel por tentativa de robo calificado.
Benítez volvió a delinquir y el 24 de junio de 2015 la Justicia lo imputó por "daño", en tanto que el 17 de febrero de 2017, fue apresado nuevamente por el ilícito más grave que cometió hasta el momento: tentativa de homicidio.
Cinco años después, el 25 de abril de 2022 el malhechor de 38 años cayó otra vez por tentativa de robo y el 20 de enero de este año, diez días antes del crimen del repartidor, fue capturado por otra tentativa de robo.
El asesinato del repartidor de comida de 20 años en Moreno despertó la indignación de sus compañeros, que reclamaron justicia frente a la Municipalidad. Los incidentes comenzaron cuando se manifestaron en las puertas de la sede arrojando piedras y escaló tras prender fuego móviles policiales.