El domingo 15 de setiembre del 2019 se cometió un nuevo femicidio en Neuquén, Plottier no salía del horror. Un día después, una multitud se convocó para exigir justicia por el brutal femicidio de Laura "Cielo" López.
Unas veinte mil personas comenzaron a llegar a la plaza San Martín lugar dónde familiares, docentes y amigos se manifestaron por las calles, sin carteles políticos, con velas, en silencio, con mirada gacha, con un solo pedido: Justicia por cielo.
Cuadras y cuadras de vecinos indignados, acongojados, buscaban respuestas mirando al cielo. Desde las 18 horas comenzaron a llegar los primeros, que en sus manos llevaban fotos de la adolescente de 18 años.
La marcha que superó las 20 cuadras se dirigió hacia la Ruta 22 y pasó por el parque "Ivana y Mayka Rosales" (otra herida abierta), luego pasó por la comisaría para retornar al punto de inicio en frente de la Municipalidad. El sol iba cayendo y la gente se iba sumando, los comerciantes en sus veredas con los ojos llenos de lágrimas.
“No tengo palabras, estoy partida en dos. Queremos justicia y que la Policía no nos oculte cosas, tengo a mi viejo dopado, tirado en una cama. No puede ser que yo me tenga que poner en contacto con ellos. Ya está cortada en pedazos, que busquen, que dejen de encubrir…”, fueron las primeras palabras de Melisa, hermana de Cielo, que se aferraba a un cartel dónde estaba el rostro de su hermanita, así como ella la llamaba.
La herida abierta no solo de un pueblo entero, sino de una provincia, fue subiendo de tono y no tardó en llegar la furia en Plottier tras la marcha pacífica. Solo un día pasó. Las redes sociales, la confusión, la búsqueda rápida de un culpable y la justicia por mano propia de una sociedad desangrada de dolor.
"El hijo del dueño de la carnicería mató a Cielo, y su madre lo ayudó", ese mensaje se viralizó en cuestión de segundos, como una "verdad absoluta". Un grupo de vecinos, no lo dudaron, saquearon el comercio, en carritos de supermercado se llevaron carne y luego prendieron fuego las instalaciones. La zona fue una verdadera balacera con la Policía.
Con las cámaras de 24/7 Noticias, registramos las ocho horas de enfrentamiento entre efectivos y unos 600 vecinos. El negocio familiar de los Lozano, terminó bajo fuego junto a dos locales lindantes. Desde entonces, nunca pudieron volver a levantar el comercio, arreglaron el local y lo alquilaron.
Lo llamativo, es que tanto Daniel como Matías, eran dos de los tres testigos que tenía la defensa. En la tercer jornada el defensor decidió desistir de sus testimonios. Y antes de los alegatos finales del juicio que culminó en el día de hoy contra Alfredo Escobar al cuál el jurado popular lo encontró culpable por ser el autor material del abuso sexual y posterior femicidio de Laura Cielo López; habló por primera vez, asegurando que el femicida de la joven "fue su amigo Matías".
Manotazo de ahogado que no le sirvió. Un año después, la herida abierta de un pueblo entero comienza lentamente a cicatrizar, nunca se va ir, no va a sanar. Será la marca de un "Cielo" al que siempre le faltará su luz.