Es común que ante cada paro docente las autoridades hablen de la importancia de la Escuela no sólo en la educación, sino también para aquellas familias de bajos recursos que confían que sus hijos recibirán al menos una comida en la escuela. Pero no se escuchan cuando el encargado de proveer los alimentos se niega a hacerlo ante la falta de pago. La situación se repite en varias ciudades, en Regina, donde el comedor de la Escuela 220 de jornada completa estará cerrado hasta nuevo aviso y 160 pibes se quedan sin comer.
No es la primera vez que el gobierno de Arabela Carreras no puede garantizar los alimentos en los comedores. Hace poco más de un mes, el sindicato UnTER y varios padres presentaron un recurso de amparo para que Educación provea de los alimentos frescos de todas las escuelas de Roca. Luego de varias semanas, y tras la intervención de la Justicia, los chicos volvieron a tener comidas en las escuelas.
Hace cerca de un mes, la misma situación se vivió en Cinco Saltos, cuando los pibes de la Escuela 88, también de jornada extendida, se quedaron sin el comedor por la falta de alimentos. Desde Educación expusieron el problema que surge con los proveedores por el constante aumento de precios.
Ahora, se conoció que la escuela de barrio Nuevo de Regina, desde mañana tendrá horario reducido porque no hay alimentos para que funcione el comedor. Los chicos ingresarán a la mañana en el horario de la copa de leche y se retirarán antes del almuerzo. Con esta medida, 160 estudiantes se quedarán sin comer.
En la ciudad, el municipio es el que aceptó hacerse cargo de comprar los alimentos para los comedores escolares con partidas especiales que llegan desde la provincia. Pero por falta de pago, el proveedor decidió cortar el servicio la semana pasada y como aún no le cancelaron la deuda, sigue sin entregar mercadería.
Desde la provincia aún no se brindó información del pago correspondiente para que la municipalidad de Regina pague a los proveedores y de esa manera los pibes vuelvan a tener clases de manera normal.