Este viernes a partir de las 8 se reanudó la búsqueda de Mirta Etelina Sandoval, la vecina de Chos Malal que dejó su auto estacionado en una ripiera a la margen derecha del río Neuquén, lo que despertó el alarma y posterior denuncia de desaparición por parte de uno de sus hijos.
Motoristas, policía montada, bomberos y el apoyo logístico de helicóptero, drones y kayaks participan de la búsqueda de la que formarán parte también este viernes los perros Dante y Quira de la Brigada Canina de Defensa Civil de la Municipalidad de Rincón de los Sauces.
Hasta ayer resultaron negativos los rastrillajes que se hicieron por tierra, agua y aire para dar con la vecina. Los rastrillajes partieron desde el punto cero donde estaba el vehículo de la vecina estacionado en la ripiera. Se presume que se adentró aguas adentro, debido a las huellas que conducen al cauce.
Pese al intenso operativo desplegado, que incluyó rastrillajes por tierra y por agua, no lograron dar con ella, y crecen las sospechas de que podría haberse ausentado con la intención de quitarse la vida, ya que recientemente protagonizó un intento de suicidio.
Según trascendió padece una profunda depresión, producto del fallecimiento de su esposo, José Luis Pavese, que ocurrió hace un año atrás. Junto a él fundó el "Café Bahía", un emblemático comercio de la localidad, que todavía mantiene abiertas sus puertas.
Ese bar (que ahora manejan sus hijos) fue testigo de gran parte de la historia de los chosmalenses. Décadas atrás supo funcionar como punto de llegada de los micros de la región, y fue el escenario de muchos eventos que los más memoriosos aún recuerdan.
Hace unos años Mejor Informado la entrevistó junto a su familia, en uno de los aniversarios de la localidad, que coincidió con una fecha clave para su histórico comercio.
¿Qué se sabe hasta ahora?
Mirta Sandoval fue vista por última vez el miércoles cerca de las 10. Sus familiares se percataron de su desaparición y radicaron la denuncia en la Comisaría 15, que inmediatamente activó la búsqueda de su paradero.
Luego, se encontró su auto, que quedó estacionado en una zona de ripiera, a la margen izquierda del río Neuquén, cerca de un sector identificado como "La Cantera de Castro". Allí la policía detectó una serie de huellas de pasos bien definidos, que llevaban hasta la orilla. Por eso solicitaron la ayuda de personal de bomberos, que envío a rescatistas a recorrer la zona.
Este jueves la búsqueda se retomó temprano. Trabajaron buzos, personal en kayaks y también se intensificó la búsqueda terrestre, que se dio sobre el lado opuesto de la Ruta Nacional 40.
Según informó el comisario Osvaldo Méndez, los operativos de rastrillaje incluyeron vehículos y motos recorriendo la Ruta 40, una patrulla de policía montada en la zona de las minas de carbón y paraje Truquico, el aeródromo hasta el cruce con Taquimilán.