En el marco de la Conferencia de Seguridad realizada en Munich, el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, avisó a su par chino, Wang Yi, que proveer de armamento a Rusia sería “cruzar una línea roja” en el vínculo entre el bloque y China.
La inquietud del bloque surge a partir de que el Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, asegurara que empresas chinas brindan efectivamente apoyo no letal a Rusia. Esto disparó la sospecha de que también Rusia esté recibiendo apoyo letal por parte de China.
“Me dijo que no lo van a hacer, pero vamos a estar atentos", aseguró Borrell que Wang le respondió ante su consulta, aunque aseguró que el bloque de los veintisiete seguirá con mucha atención la situación.
Otros miembros del bloque compartieron en que hay que enviar señales fuertes a países que estén considerando la posibilidad de asistir militarmente a Rusia. Afirman que es vital para que las sanciones a Rusia realmente tengan un efecto. Al respecto, la ministra de Relaciones Exteriores estonia, Urmas Reinsalu, afirmó que "las sanciones secundarias son un caso razonable a estudiar", al tiempo que su par lituano aseguró que cualquier país que planee ayudar a Putin “se lo pensará dos veces”, por temor a recibir las sanciones del bloque.
Cabe recordar que en las últimas horas la UE apuntó por la misma cuestión contra la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC). En ese caso, es por la entrega de drones a Rusia para su guerra contra Ucrania. En los próximos días, el bloque decidiría imponer sanciones a siete entidades conectadas con la IRGC.