El presidente sirio iraní, Bashar al Assad, recibió a su homólogo iraní, Ebrahim Raisi, en Damasco. Es la primera visita de un jefe de Estado iraní desde el inicio de la guerra civil siria hace 12 años. El país persa fue un importante aliado político y militar del régimen de Al Assad durante el conflicto y ahora está interesado en participar de la reconstrucción del país.
La delegación iraní incluyó a los ministros de Relaciones Exteriores, Defensa, Petróleo, Carreteras y Desarrollo Urbano, así como Telecomunicaciones. La seguridad fue reforzada en partes clave de la capital siria y se colocaron carteles publicitarios con retratos de ambos presidentes a lo largo de la carretera del aeropuerto, informó Deutsche Welle.
Ahora, en medio de una reorganización de las relaciones diplomáticas en la región, Damasco quiere centrarse en la reconstrucción, tarea en la que Teherán tiene una posición privilegiada. Ambos países mantuvieron una relación estratégica durante la guerra civil, y esta puede fortalecerse en un momento en que ambos países enfrentan sanciones internacionales.
Por otro lado, según el medio alemán, “tras la brutal represión de las manifestaciones, que llevaron a la guerra civil, Siria fue suspendida de la Liga Árabe en 2011, y muchos países árabes rompieron vínculos diplomáticos con Damasco. Pero eso ha ido cambiando lentamente”. Así, ciertos movimientos indican que “podría derivar en la readmisión de Siria en la Liga Árabe”.
De hecho, Emiratos Árabes Unidos y Jordania ya restablecieron contactos con Siria. Egipto recibió al canciller sirio tras más de una década. Túnez anunció que nombraría un nuevo embajador en Siria tras cortar relaciones en 2012. Y recientemente, el ministro de Exteriores y el viceprimer ministro sirios visitaron Arabia Saudita, siendo la primera visita desde 2011.