El grupo yihadista Estado Islámico (EI) asumió la responsabilidad por el atentado perpetrado en inmediaciones del mausoleo Sayeda Zeinab. Se trata de un sitio de peregrinación, muy relevante para los chiítas de Siria.
El atentado se produjo con un explosivo el jueves por la noche. Al menos seis personas murieron y más de 20 resultaron heridas. A través de Telegram, el grupo yihadista afirmó que algunos de sus combatientes lograron eludir las restricciones de seguridad e hicieron "explotar una moto bomba el jueves durante una reunión de peregrinos chiitas".
Estado Islámico también reivindicó "otro atentado con bomba", realizado contra "un autobús que transportaba a peregrinos chiitas en el mismo sector, causando al menos dos heridos y destruyendo el autobús".
El secretario general de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, aseguró que los autores del atentado en el área de Sayyidah Zeinab, en Damasco, son terroristas extremistas con objetivos bien conocidos. Nasrallah también agregó que la resistencia islámica en el Líbano no intenta competir con nadie por el dinero o el poder desde su establecimiento. “La injusticia y la opresión existentes hoy en el mundo no tienen precedentes en la historia de la humanidad”, concluyó Sayyed Nasrallah.