Después de una jornada cargada de rumores, el Presidente, Javier Milei, solicitó la renuncia al titular de ANSES, Osvaldo Giordano, y a la secretaria de Energía, Flavia Royón, tras el retroceso en la votación de la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados y las críticas del Poder Ejecutivo hacia los gobernadores.
Estos dos funcionarios ocupaban puestos clave dentro del Gobierno Nacional y tenían vínculos con Juan Schiaretti y Martín Llaryora de Córdoba, y Gustavo Sáenz de Salta, respectivamente, por lo que sus despidos apuntan a romper lazos con los mandatarios provinciales.
"La crisis económica heredada y el momento histórico actual requieren funcionarios públicos comprometidos con la modernización, simplificación y desburocratización del Estado", sostiene la carta que se compartió en X (exTwitter).
Además, se agregó que "quienes asumen la responsabilidad de un cargo público deben comprender la dura realidad que enfrentan los argentinos, y defenderlos del constante ataque de aquellos que pretenden sostener sus privilegios a costa del hambre del pueblo".