Por segunda vez, un Tribunal de Revisión revocó la prisión domiciliaria que un juez de Ejecución le había concedido a David Pino, un ex funcionario municipal de Allen condenado a 12 años de prisión por varios casos de abuso sexual. Invocando su condición de diabético, intentó ser incluido en el grupo de riesgo frente a la pandemia de coronavirus.
Este viernes los jueces Emilio Stadler, Verónica Rodríguez y Laura Pérez, resolvieron por unanimidad anular la resolución del juez Juan Pablo Chirinos, dictada a fines de junio pasado, y que mereció un amplio rechazo por parte de organizaciones defensoras de los Derechos Humanos.
Los magistrados señalaron que los argumentos con los que Chirinos basó su resolución, esto es que en un contexto de hacinamiento carcelario se agravaría el cuadro de salud de Pino, carecían de suficiencia. Por el contrario, señalaron que no existen inconvenientes para que se lo pueda aislar –de ser necesario- en el penal donde cumple la condena y recibir la atención médica correspondiente. Y así lo dispusieron, al revocar la prisión domiciliaria.
David “El Gitano” Pino fue jefe de maestranza del municipio de Allen bajo la intendencia de Sabina Costa.
En marzo de 2018 fue declarado culpable del delito de abuso sexual con acceso carnal y poco después se lo sentenció a 12 años de cárcel.
A fines de junio, Chirinos lo había beneficiado con prisión domiciliaria, ante el pedido de su defensa por ser paciente de riesgo en el contexto del coronavirus. Pero el fiscal Miguel Fernández Jahde y la querella representada por Ailén Roca impugnaron el fallo. Un tribunal de Revisión señaló que las pruebas que presentaron las partes no son suficientes para determinar si la cárcel es un lugar apto o no para alojar a Pino, que es paciente de alto riesgo, y ordenó presentar nuevas pruebas para la audiencia que fue la desarrollada este viernes, y que tuvo como abogado querellante a Marcelo Hertzriken Velasco.