Después de casi 1.800 kilómetros de viaje, el camión cargado estaba a punto de ingresar a Río Negro cuando todo cambió de repente. Es que en un control habitual de Gendarmería, el personal decidió requisar la cabina y debajo de la cucheta encontró una caja de cartón con un contenido sorprendente. Además de secuestrar el hallazgo millonario, el chofer quedó involucrado en una causa por presunto lavado de activos que investiga la Justicia Federal de Rawson.
El camión regresaba a Buenos Aires después de entregar una carga en Río Grande en Santa Cruz. El tránsito monótono por la interminable ruta Nacional 3 se desarrollaba sin problemas hasta que intentó ingresar a Río Negro. En el límite, en el paraje conocido como Arroyo Verde, estaban las patrullas del Escuadrón Sierra Grande de Gendarmería, que decidieron requisar por completo el camión.
Luego de revisar los papeles del camión, los remitos de la carga y la identidad del chofer, los hombres de verde le solicitaron al conductor que debían revisar la cabina, el sector más preciado y celoso de cualquier camionero. Sin posibilidades de negarse, el hombre descendió y dejó todo abierto para que los uniformados realicen su trabajo.
En un primer momento revisaron el bolso y la mochila del chofer, siguieron por la guantera y los distintos recovecos que tiene un camión para poder guardar cosas. Pero no encontraron nada extraño. La sorpresa surgió cuando comenzaron a requisar la cucheta y al mover el colchón, debajo del elástico, entre varias cajas con repuestos y correas, hallaron una bastante particular, que cuando la abrieron quedaron azorados.
Inmediatamente la caja fue sacada de la cabina y en presencia de testigos procedieron a abrir una bolsa de residuos que había en el interior y sacar los 85 fajos de mil dólares cada uno que estaban perfectamente acomodados y resguardados debajo de la cucheta donde duerme el chofer. El hombre no pudo justificar su procedencia y tampoco brindó detalles de qué hacía esa caja en ese lugar, aunque es imposible que desconociera de su existencia.
Inmediatamente el personal dio aviso al Juzgado Federal de Rawson que ordenó el secuestro de los dólares e inició una causa por presunto lavado de activos regulado en el artículo 303 del Código Penal. El chofer también quedó demorado a disposición de la Justicia que ahora debe investigar el origen de los billetes verdes, que al cambio blue alcanza una suma superior a los 31 millones de pesos.