El tribunal integrado por Luis Giorgetti, Raúl Aufranc y Diego Chavarría Ruiz dictó la sentencia para los jefes policiales declarados responsables por los hechos sucedidos el 4 de abril de 2007 en Arroyito, donde producto de la represión perdió la vida el docente Carlos Fuentealba. Además de las penas, se incluyeron inhabilitaciones especiales y exigencia de cumplimiento de reglas de conducta: no modificar el domicilio y presentarse cada 6 meses ante la Dirección de Población Judicializada. Ante un incumplimiento o ante la comisión de un nuevo delito, la condicionalidad se debe revocar.
Al respecto, Pablo Grisón, secretario gremial de ATEN; afirmó: "Valoramos muchísimo este fallo, aunque las acusaciones no fueron las que nosotros impulsamos, pero fueron con las que nos dejaron llegar". "Hubo infinidad de trabas y, así y todo, valoramos este fallo", agregó. Además, afirmó que "este fallo pone un límite al poder político y a la fuerza pública en relación a cómo se deben resolver los conflictos sociales... pero, el fallo llega tarde y vamos a seguir militando por esto".
En el caso de Benito Ariel Matus, responsable de abuso de armas agravado por ser funcionario policial, los jueces dictaminaron la pena de 1 año y 4 meses y la inhabilitación para portar armas por 6 meses. Los ex jefes que llevaron a cabo la represión y fueron condenados por abuso de autoridad (Carlos David Zalazar, Moisés Soto, Adolfo Federico Soto y Mario Rinzafri) recibieron 1 año y 6 meses de prisión de ejecución condicional. También, se les fijó la inhabilitación de 3 años. Por último, Jorge Garrido fue condenado a 1 año y 4 meses de prisión condicional, cuando la querella había pedido 1 año y 10 meses. Además, su inhabilitación especial será de 2 años y 8 meses.
Al ser consultado sobre cómo continúa la causa y si "el capítulo está cerrado", Grisón comentó que "nosotros valoramos la sentencia de responsabilidad y esa respuesta está en manos de las defensas y de quienes resultaron condenados". "Días atrás, usando el derecho de la última palabra, el ex jefe de la Policía dijo que él no estaba de acuerdo y que se sentía inocente, y que anticipaba que iba a apelar. Para nosotros, este fallo de responsabilidad es muy difícil que dé marcha atrás. Es un fallo muy contundente y entendemos que las condenas son razonables dentro de lo que estipula el Código Procesal Penal. Para la causa Fuentealba II queda esperar los fundamentos de la sentencia", agregó y enfatizó: "Creemos que lo que se debatió acá es quién cometió delito. No hubo corte de ruta ese día y la Policía actuó de forma descontrolada, y eso es lo que se demostró en este juicio".