Una ahora ex suboficial del servicio penitenciario de la Policía neuquina pegó un faltazo, le iniciaron un sumario por “ausencia injustificada de presentación al servicio” y la despidieron. Hasta que cayó en desgracia, trabajaba en la Unidad de Detención Nº 32, de la ciudad de Zapala.
El 15 de diciembre de 2022, la Jefatura de Policía le solicitó al Ejecutivo provincial la destitución por cesantía de la ahora ex sargento del escalafón custodia, Erica Andrea C. Ella había sido objeto de un sumario “tendiente a investigar” su conducta “por presunta transgresión a la falta administrativa prevista en el artículo A-3-1 del Reglamento del Régimen Disciplinario Policial, debido a su ausencia injustificada de presentación al servicio en fecha 17 de febrero de 2022”.
Dijeron que “al no modificarse la conducta de la encartada” avanzó el sumario interno. Luego, las partes presentaron un acuerdo ante los miembros del Tribunal Disciplinario Policial, “a través del cual la imputada aceptó el hecho y la falta administrativa atribuida”. Ahora, hace apenas unos pocos días, el Ejecutivo dispuso la destitución por cesantía.
Ya son varios los penitenciarios y policías (oficiales y suboficiales) que fueron despedidos, y algunos casos hasta exonerados, por faltazos, faltas graves o directamente delitos.