La provincia de Neuquén redujo sus deudas y no emitió bonos y letras del tesoro este año. De esta forma, no solo se redujo la planta política y eliminó una serie de gastos innecesarios que afectaban a los recursos del Estado, sino que también pagó vencimientos y evitó deudas que pudieran convertirse en anclas.
Desde el gobierno de Rolando Figueroa reconocen que aún falta. Pero también destacan que mientras se avanzó en acciones como la infraestructura de rutas, la ampliación de los centros de salud y el aumento en la capacidad edilicia de las escuelas, se redujo la deuda.
La aseveración es respaldada por datos del mercado de capitales que dan cuenta de que Neuquén se ubicó cuarta entre las provincias que más deuda pagaron. También es una de las pocas que no se endeudaron a lo largo de 2024.
El balance anual arrojó que el 72% de los pagos de títulos de todas las provincias correspondieron a amortización de capital; mientras que el 28% restante correspondió a intereses. La misma tendencia se reflejó en Neuquén, que logró pagar más que Río Negro y Chubut, en términos de vencimientos acumulados. No obstante, Buenos Aires fue la que más vencimientos pagó (más del 60% del total nacional).
En cuanto a emisiones, Neuquén no fue un emisor principal en 2024. Cosa que no ocurrió con Buenos Aires y Chaco, que concentraron el 81% de las emisiones totales del país por un valor combinado de más de 2.085.000 millones de pesos.
Una buena calificación, ahorro y variados ajustes en economía
Esta política en la administración de los recursos del Estado hizo que, el 18 de diciembre, se le notificara a Neuquén que está en condiciones de tener una mejor calificación para sus bonos emitidos en dólares. En su comunicado, la calificadora S&P Global Ratings puso de relieve “la sólida recaudación de regalías provenientes de un dinámico sector de petróleo y gas, sumada a la contención del gasto, permitieron a la Provincia del Neuquén aumentar sus reservas fiscales y de liquidez”.
También a mediados de diciembre último, el gobierno de Figueroa destacó que “en Neuquén el ahorro tiene tanto peso como el petróleo”. Explicó que si bien los ingresos por regalías se incrementaron, las políticas de austeridad permitieron garantizar la obra pública, la compra de equipamiento para seguridad, salud y educación, así como también el abastecimiento de los centros de salud.
En dicha oportunidad, el ministerio de Economía indicó que, a lo largo del ejercicio 2024 se realizaron diversos ajustes por aproximadamente un billón de pesos; y subrayó que esos gastos hubiesen generado la necesidad de emitir deuda por $220 mil millones, además de un impacto en la liquidez 2025.
“De no haber realizado los ajustes en 2024 nos hubiésemos visto obligados a suspender las inversiones previstas en el Presupuesto 2025 en infraestructura y bienes de capital por un billón de pesos, además de que hubiesen suspendido los ingresos de nuevos préstamos de organismos multilaterales dado que no podríamos demostrar nuestra capacidad de generar superávit financiero para poder cancelar con fondos propios la deuda con vencimiento en el ejercicio, a su vez hubiésemos perdido la capacidad de financiar con fondos propios parte de las inversiones de capital previstas para el 2025”, explicaron desde el ministerio que conduce Guillermo Koenig.