A raíz del motín en Villa Deboto, varios reos del país se sumaron al reclamo de prisión domiciliaria. En el caso de dos penales mendocinos, los internos se manifestaron en los patios sin llegar al motín, y otros tomaron la dramática decisión de cocerse los labios.
El sitio online Mendoza Post redactó que los internos de los penales de Boulogne Sur Mer y San Felipe reclaman por las pésimas condiciones de las instalaciones y aseguran que no están preparadas para cumplir con el Aislaminento Social Preventivo y Obligatorio que también los alcanza a ellos. Con estos fundamentos a sus reclamos de prisión domiciliaria y salidas transitorias, un total de siete internos de ambos penales, inició ayer una huelga de hambre cosiéndose los labios.
Los reclusos dicen que el tema de la higiene y la comida no es un tema menor. Normalmente los familiares de los presos les acercan estos elementos que según ellos, las instituciones no les suministran en una cantidad apropiada. Y con la cuarentena vigente, lo que significó la suspensión total a las visitas, ya no reciben estos refuerzos.