Muchas veces nos entusiasmamos porque llega el viernes y nuestro cuerpo lo pide. Es el caso de este ansioso sujeto que esperó la fiesta de disfraces emocionado desde hace meses, de tal forma que se probó el disfraz de Spiderman un tiempo antes del evento del año. Lo que no se dio cuenta, por lo menos hasta el final de la noche, es que su traje quedaría puesto por siempre.
Una nueva vida cargada de emociones y tareas para ayudar a la humanidad le espera...