Una adolescente de 14 años mantuvo comunicaciones privadas a través de la virtualidad, que incluyeron fotos con contenido sexual. En los últimos días, advirtió que fueron difundidas y está siendo extorsionada. La Justicia de la provincia del Chubut investiga el caso y habría un sospechoso de 17 años, de la localidad bonaerense de Ituzaingó.
La menor, domiciliada en la localidad de Lago Puelo, se presentó en la sede judicial con su padre para denunciar la situación e inmediatamente tomó intervención el Fiscal Jefe, Carlos Díaz Mayer. Trascendió que las diligencias, encuadradas en el delito de grooming, extorsión y distribución de imágenes sexuales, llevaron al domicilio de un joven de 17 años, radicado en Ituzaingó.
Según se desprende del relato de la menor, desde hace unos dos años mantuvo una relación virtual con mensajes y posteos con el joven, ingresando paulatinamente en una situación de confianza mutua y –especialmente en el período de encierros por pandemia- de “contención” en momentos de angustia y soledad.
En ese marco, “ella se confió y comenzaron a intercambiar fotografías” con contenido sexual, según se indicó en cercanías a la investigación. No obstante, desde hace varias semanas, la joven comenzó a recibir mensajes de otros usuarios con la indicación que habían visto esas imágenes, tras lo cual reclamó al joven por la publicidad de ese contenido privado. Allí la relación habría tomado otro cariz, al punto de realizarle extorsiones para retirar el contenido de las redes virtuales.
En determinado momento, el diálogo por internet de ambos adolescentes habría llegado a la amenaza de él de llegar hasta la localidad chubutense y tomar acciones violentas, según se indicó.
Desesperada, contó a su padre lo que estaba viviendo y se presentaron a la Justicia.
Se supo en las últimas horas que en las diligencias llevadas a cabo en Ituzaingó, se habría secuestrado “alguna evidencia”, especialmente equipos electrónicos entre los que se cuentan teléfonos celulares y computadoras, en los que se realizará el peritaje sobre las imágenes señaladas por la joven.
No obstante, ambos involucrados son menores de edad, por lo que se resguarda la difusión de sus identidades en forma pública y también se toma el resguardo en las actuaciones policiales y judiciales, como está previsto en el Código Penal Argentino.
La menor chubutense comenzó a ser asistida por profesionales de salud mental, para contener su aspecto sicológico como así también su núcleo familiar.