Este martes hubo una nueva audiencia por el caso Lolen, donde cuatro guardaparques y dos responsables del camping Lolén estaban procesados por la caída de un árbol que ocasionó la muerte de dos menores, Martina Sepúlveda de dos años y Matías Mercanti de 7, el 1 de enero del 2016.
El hecho ocurrió en pleno festejo de año nuevo, un roble pellín cayó hacia la playa del lago Lácar y aplastó a los chicos, mientras que a la vez causó múltiples heridas a dos adultos que estaban allí.
Este martes, el tribunal, integrado por los jueces Alejandro Cabral, María Paula Marisi y Pablo Díaz Lacava, determinó la absolución del titular de Guardaparques, Diego Lucca; el jefe del Departamento de Conservación y Manejo, Juan Jones; la jefa de Uso Público del PNL, María Hileman; y el guardaparque Matías Encina, quienes se encontraban imputados por homicidio culposo, presunto incumplimiento de los deberes de funcionario público y lesiones graves.
Durante los alegatos, la fiscalía solicitó tres años de prisión en suspenso por "homicidio culposo agravado por el número de víctimas y de lesiones graves culposas".
La demanda ya tuvo tres instancias: una falta de mérito y dos sobreseimientos, en 2019 y en 2020. Ahora, el juicio oral se llevó a cabo desde el 30 de octubre hasta este 2 de noviembre en el Tribunal de Casación de Neuquén. Por parte de los guardaparques, están imputados por homicidio culposo, presunto incumplimiento de los deberes de funcionario público y lesiones graves. Dentro de los responsables del camping, hay dos integrantes de la comunidad mapuche Curruhuinca imputados por homicidio culposo y lesiones graves.
Este lunes, en el medio de un temporal en la localidad de San Martín de los Andes, sus familiares convocaron a una marcha para pedir justicia por el trágico hecho. “Ningún fallo nos va a devolver a nuestros hijos, pero no queremos que esto que pasó le vuelva a pasar más a nadie”, expresó Lucas Sepúlveda, padre de uno de los jóvenes fallecidos, a Realidad SanMartinense.
Durante estos últimos meses, guardaparques de los distintos Parques Nacionales han estado realizando paros de actividades y manifestaciones públicas para que se diluya las demandas contra los trabajadores: “Toda esta denuncia se basa en el supuesto de que un guardaparques tiene que saber qué día, a qué hora y en qué dirección se van a caer todos y cada uno de los millones de árboles que componen el bosque andino-patagónico, desde Neuquén hasta Tierra del Fuego. Y eso es imposible”, dijo a La Nación el guardaparques Hernández Otaño.
La fiscalía solicitó tres años de prisión y cinco de inhabilitación para los cuatro guardaparques y la absolución de los mapuches. En tanto, la defensa pidió la absolución de los acusados al argumentar que la tragedia se debió a hechos imprevisibles de la naturaleza.