Si prospera un proyecto que fue recientemente presentado en la Legislatura, las y los integrantes de las comunidades travesti y trans de la provincia de Neuquén tendrán una “reparación económica”. Es decir, cobrarán un subsidio mensual.
El proyecto de ley fue presentado por la coordinadora de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTA) en Neuquén, Katiana Villagra; y por la presidenta de la Mesa por la Igualdad Neuquén, Daiana Torres. Pero cuenta con varias firmas.
Según explicaron en los fundamentos, la iniciativa propende a resarcir, desde el Estado provincial, a “integrantes de la comunidad travesti transexual y transgénero, víctimas de algún tipo de violencia, vulneración o discriminación, que haya impedido el ejercicio pleno de sus derechos y libertades”. A modo de ejemplo enumeraron situaciones de exclusión social, educativa -también sanitaria- y vulneración a la identidad.
Si es que cuenta con el respaldo de los diputados y se hace efectivo, el subsidio consistirá en una reparación económica mediante una prestación “mensual, vitalicia e inembargable”. El monto equivaldrá al contemplado para la categoría FUD del escalafón administrativo del Poder Ejecutivo, y solo podrán acceder al beneficio quienes superen los 40 años y hayan hecho el cambio registral para acreditar la identidad de género.
Llamativamente, el proyecto tiene fecha de vencimiento y dice que, en caso de aprobarse, la ley “tendrá vigencia hasta 2052”. También considera a ese subsidio como una “pensión reparatoria”.
Señalaron, además, que “la expectativa de vida de las personas travestis y trans no supera los 41 años”, y aseguraron que “la violencia institucional ha sido una constante en la trayectoria de vida de las personas travestis y trans”. Lo consideraron de ese modo, pese a que en Neuquén hay una subsecretaría de Diversidad, que administra recursos millonarios, al igual que el ministerio (de las Mujeres) que la contiene.