Fue un martes alterado en la ciudad de Centenario, en donde un comerciante cayó al Juzgado de Faltas con un bidón de combustible y gomas de vehículos para reclamar la habilitación de un local, el cual fue clausurado porque no había presentado la documentación en los plazos estimados. Finalmente, el vecino pudo completar el trámite y logró conseguir la documentación correspondiente para su comercio.
El hecho se registró cerca de las 13, en donde el hombre junto a otro joven amenazaron con prender fuego el establecimiento ubicado entre las calles Canadá y Perú debido a la clausura comercial. Sin embargo, tras la intervención de personal policial de la Comisaría 52º, ambos entraron en razón a través del diálogo y abandonaron el lugar en paz, ya que no se emitió ninguna denuncia.
La jueza de Faltas de Centenario, Carolina Vidal, explicó este miércoles en Así Estamos por Mitre Patagonia que no cree que haya sido un "intento incendiario", ya que "el señor estaba en un estado de desesperación". Asimismo, agregó que "no es un señor que tenga conductas habitualmente violentas".
Por último, volvió a explicar que el caso surge de un expediente que tenía decretada la clausura porque no tenía la habilitación comercial.
"El señor tenía el expediente tramitando desde principios de septiembre y ayer cerca del mediodía dio cumplimiento con la documentación que le faltaba", aclaró. Pero, "por una cuestión de plazos", se le notificó que los levantamientos de clausura se iban a hacer recién este miércoles. "Se enojó y procedió como es de público conocimiento", reveló.