La nueva información sobre el caso de Cristian Moya, el panadero que fue asesinado a balazos en Senillosa, hizo crecer el misterio sobre lo ocurrido. El dato que desconcertó por completo a los investigadores es que, en la vivienda de Moya, habían alrededor de 700.000 pesos que los autores del crimen dejaron.
La información preliminar de los informadores indica, que Moya fue interceptado al llegar por la medianoche del martes a su domicilio ubicado en la calle Calixto Ceballos 665 del barrio Costa del Limay, en su auto Fiat Cronos.
La autopsia reveló que el panadero recibió cinco balazos, de los cuales dos fueron con un calibre 38. Además, recibió otro impacto de bala en el pecho que fue lo que le termino quitando la vida.
Sin embargo, todo indica que los homicidas no ingresaron a la casa de Moya. Porque los investigadores encontraron cerca de 700.000 peses que nadie tocó, según informaron fuentes judiciales este jueves. Creen que la plata era de la víctima.
Una de las hipótesis que maneja la fiscal de la unidad de delitos contra las personas, Silvina Moreira, es que el homicidio se produjo en ocasión de robo porque se llevaron el auto del panadero, pero el descubrimiento de ese dinero en la casa desorienta a los investigadores.